Los ambientalistas debemos ser escuchados políticamente

Nuestro Papa Argentino “Francisco” aseguró que: “un buen católico participa de la vida política”, consideró además que la “humildad y el amor para el pueblo” son características indispensables para quien gobierna.

Ese es el paso a seguir, integrarse a la política con «ideas y sugerencias», pero sobre todo con mucha fe.

En el mes de junio tuvimos la gran alegría y honor de ser Bendecidos por el Santo Padre, por nuestras tareas ambientales que las venimos realizando desde hace muchos años a la fecha, esto significa para nosotros un aval venido directamente del hombre más popular y humilde en estos momentos. Un hombre que llegó a la iglesia católica con nuevas ideas para impulsar cambios innovadores , y que cuenta además, con la admiración y apoyo de los demás patriarcas de otras religiones.

Dice Francisco que quien gobierna “debe amar a su pueblo” porque “un gobernante que no ama, no puede gobernar, podrá disciplinar, poner un poco de orden, pero no gobernar”.

Estar al servicio del cuidado del medio ambiente y tratar por todos los medios de crear conciencia en las personas, es una tarea ciclópea e ingrata, en la cual se ganan infinidades de enemigos, entre ellos personas del poder informadas sobre política; pero no formadas políticamente.

Los políticos informados son olvidados rápidamente, sólo son aves de paso, a los cuales los pone y los saca el soberano, el pueblo, ellos piensan solo el momento, y la vorágine de sus pretensiones personales desmedidas, terminan desmoronando sus proyectos personales; sin ver que el pueblo los eligió, no para que sus propios beneficios, sino con la esperanza de tener representantes capaces de trabajar por la comunidad. El soberano vive el día a día, el informado ya piensa en el 2015.

El político formado piensa y ama a su pueblo, acepta críticas constructivas que lo ayudan a fortalecer su criterio para poner orden y gobernar, el político formado queda en su pueblo y se sustenta en el tiempo.

Ser ambientalista es ir en contra de muchos intereses, es como tener arena en los zapatos de los informados, es hacer política en contra, es colocarse automáticamente en la vereda del frente, por el solo hecho de pedir que se dejen de destruir los recursos naturales a los cuales se les saca todas las riquezas.

Los políticos formados son líderes, incentivan una política participativa, no castran a los que piensan distinto, construyen desde las diversas opiniones el mejor camino para su pueblo.

Desde nuestra posición ambiental firme, no podemos decir: “nosotros no somos responsables de este gobierno”, tampoco podemos mirar al costado cuando vemos que desmontan indiscriminadamente, desvían un río, explotan una montaña, solo para complacer las pretensiones de los políticos informados, claro que somos responsables, es por eso que aportamos, nos inmiscuimos y participamos en la política a nuestro modo, denunciando muchas de estas malas conductas, aún sin ser escuchados o ignorados.

Dijo “Francisco”: la política es una doctrina social, una de las formas más altas de la caridad, porque sirve al bien común. No podemos lavarnos las manos, debemos hacer algo, salir a hacer lío, guste o no guste, molestemos o seamos hormigas caminando y mordiendo al político informado y aportando mejores ideas al político formado.

Prof. Pedro Martínez

Conciencia Ambiental Tucumán

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